Nuestro ADN

Fundada por el apasionado exciclista profesional y emprendedor, Juan Vitoria.

Esta historia comienza cuando Juan descubre su pasión por el ciclismo en los años 70 y se inicia en la competición, dando el salto a profesionales en los años 80.

Además de ciclista, Juan era un apasionado de la bicicleta, lo que le empujó a buscar oportunidades en este mundo.

Instalado en Locarno (Suiza) durante los 70 y 80, donde aprendió la técnica de la fabricación de cuadros de bicicletas. Tras años de experiencia y conocimientos Juan tomó la iniciativa de dar vida a su sueño: crear bicicletas de calidad excepcional que se destacaran en el mercado. Así se fundó la firma “Vitoria” en el año 1988.

 

Los comienzos no fueron fáciles. Reinstalado en España en el año 1991, con recursos limitados y un mercado competitivo, Juan trabajó incansablemente para desarrollar sus propios diseños y tecnología. Cada bicicleta que salía de su taller era un testimonio de su dedicación y amor por el ciclismo. La atención al detalle y la calidad superior se convirtieron en su sello distintivo, y la reputación de la empresa comenzó a crecer.

 

La familia se involucró más en el negocio a medida que pasaron los años. Las hijas de Juan; Esmeralda y Diana, se unieron a la empresa y aportaron nuevas ideas y energía fresca. Con el tiempo, la empresa familiar expandió su alcance, exportando bicicletas a diferentes países y participando en ferias internacionales.

 

A lo largo de su trayecto, esta empresa mantuvo su enfoque en la calidad, la durabilidad y la satisfacción del cliente. Continuaron mejorando sus diseños, incorporando tecnología de vanguardia y manteniendo su compromiso con el ciclismo sostenible. También se involucraron en proyectos comunitarios, promoviendo la movilidad sostenible y apoyando causas benéficas relacionadas con el ciclismo.

Hoy en día, su esencia sigue siendo la misma: el amor por el ciclismo y el compromiso con la calidad. Su historia es un testimonio de cómo la pasión, el esfuerzo y la dedicación pueden convertir un modesto taller en una empresa exitosa que ha dejado una marca en el mundo del ciclismo. Y así, después de más de 30 años, su legado continúa rodando en cada bicicleta que producen.

Nuestro Trabajo

Calidad: La calidad ha sido siempre uno de los valores principales para la fabricación de los cuadros Vitoria, utilizando los mejores materiales y técnicas de fabricación para garantizar un producto duradero y confiable. Confianza en las marcas referentes del sector, que ofrecen la mejor calidad y las últimas innovaciones del mercado.

 

Innovación: La empresa busca constantemente la innovación en el diseño y la tecnología de fabricación de cuadros, con el objetivo de ofrecer productos que sean líderes en el mercado y satisfagan las necesidades cambiantes de los ciclistas.

 

Sostenibilidad: Se presta atención a la sostenibilidad ambiental en el proceso de fabricación, minimizando el impacto ambiental y promoviendo prácticas responsables en toda la cadena de producción.

 

Artesanía: La empresa valora la artesanía y la atención al detalle en cada bicicleta, garantizando que sea única y meticulosamente ensamblada.

 

Pasión por el ciclismo: Los valores de la empresa reflejan una profunda pasión por el ciclismo, y esto se traduce en la dedicación a crear cuadros que mejoren la experiencia de los ciclistas y contribuyan al amor por este deporte.

Compromiso con el cliente: La empresa se compromete a satisfacer las necesidades y expectativas de sus clientes, brindando un excelente servicio al cliente y una atención personalizada en la elección de las bicicletas que se adapten a las preferencias y necesidades individuales.

Nuestros Valores:
Inspirar, Compartir, Explorar

El ciclismo es mucho más que una actividad; es una pasión que puede enriquecer nuestras vidas de muchas maneras. Inspirar a la gente a amar el ciclismo implica destacar sus beneficios para la salud y el medio ambiente, compartir historias personales de superación y aventura, fomentar la comunidad ciclista, educar sobre la seguridad y celebrar la emoción de explorar el mundo sobre dos ruedas.

El ciclismo es una fuente inagotable de inspiración que puede cambiar vidas y promover un estilo de vida activo y sostenible.